¡Qué onda, carnales! Agárrense porque la nota que les traemos hoy está que arde, como chile habanero. Se trata nada más y nada menos que de un chamaco que trae la espina clavada y anda echando lumbre por una revancha contra nuestro mero petatero, el mismísimo "Canelo" Álvarez. ¿Quién es este valiente? Pues se llama Edgar Berlanga, un boxeador que se las gasta de Puerto Rico y que, con todo el descaro, ya está pidiendo otra bailada con el "Canelo", y lo peor (o mejor, según se vea) ¡dice que ahora sí, le gana fácil! ¡Ah, qué Berlanga! Ya hasta parece que le anda echando más crema a sus tacos de lo que el molcajete aguanta, pero al buen entendedor, pocas palabras... ¡o muchas, si de doble sentido se trata!
A ver, raza, pónganse truchas. El tal Berlanga, un puertorriqueño que se anda haciendo de nombre en el boxeo, no suelta la idea de volver a subirse al ring con Saúl "Canelo" Álvarez. Este cuate, que ya tuvo su agarrón con el "Canelo" allá por septiembre del 2024, anda pregonando a los cuatro vientos que en esa ocasión, ¡ay, nanita!, andaba al 50%. Sí, así como lo oyen, medio tullido, con un brazo izquierdo que le andaba haciendo la mala jugada. ¡Quién sabe si le andaba fallando la puntería o de plano se le engarrotó la mano a la hora de soltar los "guamazos"! Pero el caso es que este "macho", como se diría por acá, insiste en que no dio el ancho, y que si le dan otra oportunidad, ¡agárrense!, porque ahora sí le va a poner una tunda a nuestro campeón. "Fácil", dice el muchacho. ¡Híjole, qué osadía!
Y es que este chavo, con todo y su desparpajo, jura y perjura que ya anda en su "prime", en su mejor momento, como los aguacates que ya están listos para el guacamole. Dice que ahora sí está completito, como tamal de hoja de plátano, y que puede hacerle la competencia a nuestro "Canelo", ese mero mole que es el campeón indiscutido de las 168 libras. ¡Casi nada! Como si el "Canelo" fuera cualquier "tirado a león" de barrio. Aquí en México sabemos que a nuestro campeón no le sacamos la vuelta, y menos con esos comentarios que huelen a puro "choro mareador".
Pero la cosa no para ahí, mis estimados. El Berlanga ya hasta le anda haciendo la barba a los meros meros. Se le ve muy pegado a Turki Alalshikh, ese señorón que es el presidente de la Autoridad General de Entretenimiento de Arabia Saudita. Y es que, según el propio Berlanga, el Turki este, ni tardo ni perezoso, ya anda picándole la cresta para que esa revancha se haga. ¡Imagínense! Como si fuera una apuesta de gallos, pero con billetes de a de veras. Este Berlanga es de los que no se andan con rodeos, va al grano, como la yuca. Y si ya se le pegó a un pez gordo, es porque sabe que le puede sacar jugo a la situación. No es ningún "come cuando hay", este sí anda buscando el banquete completo.
En una entrevista que anduvo circulando por ahí, el Berlanga no se anduvo por las ramas y soltó la sopa: después de que le dé su llegue a un tal Hamzah Sheeraz, ¡zas!, va a ir directo por la revancha con el "Canelo". Y es que el Turki, ese que les digo que es el mero patrón de la fiesta, le hizo una promesa: si le ganaba al Sheeraz, ¡tenía el boleto para la pelea con el "Canelo"! Así que, el Berlanga anda más que motivado, como perro envenenado, con ganas de morder y no soltar. ¡Vaya promesa! Esto ya parece una de esas películas de Hollywood donde el héroe tiene que pasar una prueba para conseguir su premio. Y aquí, el premio gordo es el "Canelo".
El Berlanga, muy a su estilo, volvió a soltar el chismecito de que en la pelea pasada, contra nuestro campeón, no andaba al cien. Que si la lesión, que si el brazo, que si la abuela fuma... ¡Puras excusas! Pero eso sí, el tipo tiene la confianza por los cielos, más que un papalote en día de aire. Dice que en una revancha, le gana "fácil". ¡Ay, Berlanga, no te confíes que el "Canelo" no es de palo! Aquí en México sabemos que el que mucho abarca, poco aprieta, y el "Canelo" no se anda con medias tintas cuando se sube al cuadrilátero. La palabra "fácil" en el boxeo es como echarle sal al agua de horchata: ¡no va!
Y para que vean que este chamaco no se anda por las ramas, ya está echando raíces en las montañas de Colorado, entrenando a todo vapor. ¡Imagínense! Como los guerreros de antes, subiendo cerros y dando puñetazos al aire, preparando ese brazo que dice que le falló. ¿Será que ahora sí trae la "chispa" completa? ¿Será que ya se le quitó lo "manquedá"? Sea como sea, el Berlanga anda con todo, queriendo romper el cochinito y llevarse el premio mayor. No le anda echando la culpa al empedrado, este sí le está metiendo ganas para cumplir su cometido.
El tema de la revancha es un platillo que se cuece aparte en el mundo del boxeo. No cualquiera se avienta el tiro de volver a enfrentar al que lo puso a bailar al son que no quería. Pero el Berlanga tiene "calzones" para eso y más. Quiere demostrar que lo de la primera vez fue un "resbalón", un mero "tropezón" en el camino. Y no es para menos, porque el "Canelo" es de esos que te marcan de por vida, como tatuaje de la cárcel.
Así que, mis queridos lectores, la mesa está puesta para que esta novela boxística tenga otro capítulo. El Berlanga ya lanzó el reto, el "Canelo" anda en lo suyo, y el Turki, con su poderío, podría hacer que este encuentro se dé. Solo queda esperar a ver si el "Monstruo" boricua tiene lo suficiente para darle una buena pelea a nuestro campeón, o si solo se quedará con las ganas de un segundo "round" para que el "Canelo" le vuelva a dar su "coco". Porque aquí en México, aunque nos encante el drama, también nos gusta ver ganar a los nuestros. ¡Así que, "Canelo", ponte trucha, que ya te andan retando hasta por el refresco! Y tú, Berlanga, ojalá que la montaña de Colorado te dé la fuerza para que no salgas con que te andaba fallando el brazo otra vez, ¡porque aquí no somos "nalgas prontas" para creerte la misma historia!
¡A ver, a ver! Aquí entre nos, este Berlanga ya está haciendo su "numerito" para que lo volteemos a ver. Sabe que si se le pega al "Canelo", aunque le pongan una golpiza, ya se ganó su lugar en la conversación. Es de esos que le sacan jugo hasta a las piedras, y si le dio por retar al campeón, es porque quiere su rebanada del pastel. No es que sea un "mantenido", es que sabe "vender" su imagen.
El mundo del boxeo es como la vida misma, lleno de altibajos, de golpes y contragolpes. Y este Edgar Berlanga es un ejemplo de que el que no arriesga, no gana, o al menos no se da a conocer. Quiere ponerle los puntos sobre las íes a esa pelea pasada, porque al parecer, le dejó un sabor amargo, como mezcal de mala calidad.
Así que, mis amigos, prepárense porque esta historia está lejos de terminar. El Berlanga anda con la mecha prendida, el "Canelo" sigue siendo el rey de reyes, y los billetes verdes, como siempre, serán el motor de esta maquinaria boxística. ¿Se dará la revancha? Solo el tiempo lo dirá, pero de que el Berlanga ya puso el dedo en la llaga, ¡eso que ni qué! Y a ver si ahora sí, el "Canelo" le da una "clase de humildad" para que no ande con esos "aires de grandeza" que no le van. ¡Porque aquí en México, al que le ponemos los cuernos, se los ponemos bien puestos, y el que se anda metiendo con nuestro campeón, se las ve duras!
Y para que no digan que les andamos inventando chismes, aquí les dejamos las fuentes de donde sacamos este relajo:
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