Dicen por ahí que cuando el río suena es porque Topuria ya está calentando. Y sí, últimamente se ha hablado con ganas del tiro entre Ilia Topuria y Conor McGregor. Una bomba que muchos fans del UFC sueñan con ver: el gallito español con sangre georgiana, excampeón del peso pluma, queriéndose rifar con el loco más famoso del octágono: “The Notorious” McGregor.
La neta, si eso pasa, va a arder Troya. Pero antes de que nos emocionemos como niños en Navidad, hay que ponerle lupa a los detalles… porque Topuria no quiere subirse al octágono con McGregor así nomás. Le puso condición. Y no es cualquier cosa, eh.
Según soltó la banda de BolaVIP, Topuria está dispuesto a subirse con el irlandés, pero McGregor tendría que morir y volver a nacer. Que de entrada no suena descabellado, pero sabemos cómo es Conor… se ausenta, regresa cuando quiere, lo meten y sacan del ranking como fichita de dominó. Así que no es tan sencillo como parece.
¿Y qué dijo exactamente Topuria? Básicamente le tiró directo al orgullo: "Si McGregor se tuviera que preparar para pelear conmigo, tendría que morir y volver a nacer". Golpe directo al ego del irlandés, que de por sí anda que se lo lleva la fregada porque no ha peleado desde 2021.
Y bueno, la bronca no es nueva. Topuria lleva rato calentando el ambiente, y Bein Sports lo puso clarito: el español no le saca a nada, pero también quiere que esto sea una pelea seria, no un show. Y mientras tanto, McGregor anda tirando indirectas, pero más enfocado en su pleito con Islam Makhachev. O sea, parece que anda cazando varios frentes a la vez, como buen bravucón de cantina que ya está medio ebrio y no sabe a cuál mesa retar primero.
Pero ojo, esto no es sólo cuestión de egos. Topuria viene con el de ser campeón del peso pluma bien fajado y con hambre de más. Está invicto y subiendo como espuma. Y lo que quiere es pelear con alguien que le deje marca, que lo ponga en los reflectores de todo el planeta… ¿y quién mejor para eso que Conor McGregor?
Aunque claro, McGregor también sabe lo que hace. El tipo es un showman. Si acepta el tiro, va a pedir cifras de otro planeta, millones de dólares, derechos de transmisión y probablemente hasta una isla privada con tequila ilimitado. No da paso sin billete. Entonces, aunque el interés existe, armar la pelea sería como juntar agua y aceite… a menos que el billete fluya como río en temporada de lluvias.
Ahora bien, si nos ponemos a soñar, ¿cómo sería ese tiro? McGregor, con su estilo de contraataque afilado, el famoso "left hand from hell", contra Topuria, que tiene manos rápidas, buen jiu-jitsu y viene enrachado con confianza brutal. Lo interesante es que Topuria ha mostrado ser más técnico y menos dependiente de la euforia del público. McGregor, por otro lado, muchas veces pelea más con el hocico que con las manos, aunque nadie le quita lo peligroso cuando conecta limpio.
Y otra cosa importante: la motivación. McGregor lleva años sin brillar de verdad. Su última gran victoria fue hace siglos, y desde entonces ha sido más celebridad que peleador. Topuria, en cambio, tiene el hambre del campeón nuevo, el que quiere probar que su reinado no fue chiripa. Y eso, banda, marca la diferencia en una pelea.
Pero hay un “pero” grandote: McGregor sigue sin fecha confirmada ni rival oficial. Aunque si algo nos ha enseñado el UFC es que las cosas cambian de un día para otro, y si Dana White ve la oportunidad de llenar estadios y hacer billetes, va a mover cielo, mar y tierra para que esto suceda.
Mientras tanto, Topuria ya dejó claro que no le tiembla la voz ni la mano para pelear. Quiere un tiro importante, pero no es probable que sea con McGregor. Y menos con un McGregor que no está en el ranking y que sólo quiere pelear cuando le da la gana.
Entonces, ¿se arma o no se arma la bronca? Pues depende. Depende de si McGregor se pone serio, si UFC ve el negocio y si Topuria no se le ve algo de beneficio a ese tiro. Lo que sí es claro es que la pelea se está cocinando una buena pelea para Topuria en el corto plazo.
Y ya para cerrar, hay algo que decir con todas sus letras: Topuria no está jugando. El tipo quiere grandeza, y sabe que pelear con McGregor ya no es tan importante para él… solo sería una vitrina, un legado, una historia que se cuenta por años.
Así que pónganse buzos, porque si esto se arma, que es muy poco probable, vamos a ver madrazos de antología. Y si no, al menos ya sabemos que Topuria no le saca… solo le pide a Conor que llegue bien puesto, y con las ganas de dejar el alma en el octágono.
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